Por dicho servicio se pagaría una contribución según el avalúo fiscal de haberes de la propiedad y tendrían servicio gratuito de alcantarillado los establecimientos fiscales, los de enseñanza gratuita y los de beneficencia64. Cuando la preocupación de los propietarios es devolver el agua más limpia posible a la naturaleza, un sistema pure extremadamente eficiente es el sistema de juncales o reed beds. Básicamente, este sistema recibe el agua drenada de la fosa séptica, pasando por un camino que contiene diferentes especies de plantas macrófitas, que filtrarán las impurezas a través de sus raíces. Otra opción es utilizar un biodigestor, que también es un tanque cerrado que funciona en ausencia de oxígeno para acelerar el proceso de descomposición de la materia orgánica.
Efectivamente, la ley 3.092 de 1916 señalaba que, en todas las poblaciones dotadas de servicio de agua potable por el Estado o las municipalidades, sería obligación de todos los propietarios instalar arranques domiciliarios para el servicio de sus respectivos inmuebles. Por último, establecía multas para quienes no pagaran el servicio y los mecanismos para su cobro por vía judicial66. Los sistemas de saneamiento tienen como objetivo proteger la salud humana, proporcionando alcantarillado pluvial particular un ambiente limpio que pueda prevenir la transmisión de enfermedades, especialmente a través de la vía fecal-oral. Las aguas residuales, o alcantarillado, se refieren al agua usada, que incluye heces, desperdicios de alimentos, productos de limpieza, jabón, grasas e incluso aguas residuales industriales, entre muchos otros. El tratamiento tiene como objetivo eliminar los contaminantes de las aguas residuales y convertirlas en un efluente que pueda devolverse al ciclo del agua.
Para este efecto, los municipios levantarían redes de alcantarillado a las que los vecinos se conectarían obligatoriamente, debiendo pagar por el servicio una cuota que fijaría el municipio33. Dado el bajo nivel de ingresos del país, y su baja recaudación fiscal, lo anterior no era de extrañar. De todas las políticas de salud pública, quizás las relacionadas con provisión de agua potable y alcantarillado son las que requieren de mayor inversión por parte de los estados8, lo que en países en desarrollo dificulta avances sustantivos en esta materia, en especial en América Latina donde el sector ha sido históricamente postergado9.
74Por largo tiempo el gobierno central trató de conseguir agua potable desde la cordillera para abastecer a Antofagasta, incluso apelando al apoyo de empresas privadas (salitreras). 61Páez, Abastecimiento de agua potable…; Alegría y Celedón, «Historia del sector sanitario chileno», 1-55. 25Piwonka, Las aguas de Santiago de Chile…, Böttner, El fracaso de la Comuna Autónoma en Chile…
Una innovación period la posibilidad de que los servicios públicos de agua potable y alcantarillado pudieran ser administrados por privados. Para esto se debía presentar un anteproyecto al presidente de la República, quien aprobaría la concesión por un plazo de 10 años. Sería obligación de la empresa privada costear todas las instalaciones alcantarillas cuadradas de agua potable y alcantarillado, incluido los arranques domiciliarios. Las tarifas se calcularían de modo que las entradas de la Empresa cubrieran los gastos de explotación y conservación de las obras, que permitieran formar un fondo para renovación de las instalaciones y rendir un interés hasta de un 10% del capital inmovilizado.
De nuestro estudio se observa que sostenidamente se destinaron del presupuesto nacional recursos para avanzar gradualmente en la instalación de los servicios sanitarios a nivel nacional, pero no con la celeridad requerida, ni con la igualdad recomendada. Asimismo, cabe destacar que otra razón que explica la lentitud en la construcción de infraestructura sanitaria es el carácter subsidiario de los servicios de agua potable y alcantarillado. En efecto, una vez que los servicios entraban en operaciones se entregó un subsidio universal al consumo mediante bajas tarifas. Dicha política se justificó argumentando que brindar acceso al agua potable y alcantarillado a bajo costo a la mayor población posible mejoraba la salubridad y prevenía enfermedades relacionadas con la falta de higiene a toda la población del país. Luego de un largo camino recorrido, Chile logró una cobertura de casi 100% tanto de la provisión de agua potable161, como de alcantarillado y tratamientos de aguas servidas urbanas, además de altas coberturas para la población rural en estos servicios. Todo lo anterior fue principalmente fruto del trabajo de organismos del estado durante varias décadas, salvo el tratamiento de aguas servidas, que un proceso más bien tardío e implementado por el sector privado luego de un profundo proceso de privatización.
La intervención del Estado en el servicio de agua potable y alcantarillado significó que los municipios entregaran la gestión de estos servicios a instituciones estatales, específicamente a los ministerios del Interior y de Obras Públicas48. En este último ministerio fue la Inspección General de Hidráulica, dependiente de la Dirección General de Obras Públicas, la institución encargada de realizar los estudios y presupuestos sobre agua potable y alcantarillado, tanto para dotar de estos servicios a nuevos poblados como para el mejoramiento, mantención o ampliación de los mismos en centros urbanos que ya contaran con ellos. Una vez autorizados estos estudios y presupuestos por parte del ministerio del Interior, la Inspección General de Hidráulica procedía a la ejecución de las obras mediante la licitación pública de estas a contratistas privados. Concluidas las obras de agua potable y alcantarillado, estas quedaban a cargo del ministerio del Interior para su administración49. “Este sistema de desagüe en las viviendas funciona mediante la fuerza de la gravedad, permitiendo así la salida eficiente de las aguas residuales hacia el exterior. En este proceso, el punto más elevado de la red de tuberías suele estar conectado al último artefacto sanitario de la vivienda, asegurando así un flujo adecuado y una gestión eficaz de las aguas residuales en la propiedad.
Las cañerías Polypipe son negras y gruesas, se utilizan mucho en los edificios para transportar agua con un sistema de alta presión. Las tuberías de acero se emplean en la construcción de viviendas y locales comerciales, en jardines o exterior, pero el tiempo de vida no es muy alto ya que se corroe por las condiciones ambientales naturales. Y, solucionado en gran parte el problema del agua “potable” a finales del siglo XIX y ad portas del alcantarillado, retomemos la historia de las acequias, de acuerdo al ingeniero Tagle que nos ha servido de guía hasta aquí6. 104Asimismo, debemos destacar que durante este periodo también proliferaron pequeños servicios de agua potable privados. Se estima que en 1958, del complete de la población que disfrutaba agua potable en sus hogares, un 18% period abastecida por servicios particulares, y el 82% restante por fiscales. 82Mención especial de empresas privadas proveyendo agua potable merece la The Tarapacá Water Works Company, que abastecía partes de Iquique y algunas oficinas salitreras, fundada en 1888.
En el siglo XX se construyó el alcantarillado, pero no ha sido nuestro propósito relatar tamaña obra de ingeniería sino presentar los hechos que impulsaron a realizarla, es decir, dando al cuento un final feliz. Una completa y exhaustiva historia de su construcción y génesis, desde 1887 a 1910, ha sido publicada recientemente por Enrique Fernández Domínguez, del Departamento de Estudios Hispánicos e Hispanoamericanos de la Universidad de Paris 814. Por cierto que, como suele ocurrir en Chile, tras larga discusión, el canal propuesto no se construyó y se siguió bebiendo el agua turbia del Mapocho, hasta que la idea resucitó el 29 de julio de 1718 con un informe del physician francés Lesevinat, cuyo apellido los vecinos chilenizaron como La Sirena, quien acusó al Mapocho, según relata Vicuña Mackenna, de causar todas las enfermedades de Santiago. Las primeras tuberías para desagües y para distribuir agua eran de plomo y de fierro galvanizado. 95Ministerio de Interior, Memoria de la Dirección general de servicios agua potable y alcantarillado de 1945, 8-9. 93Ministerio de Interior, Memoria de la Dirección general de servicios agua potable…, 7.
La mayor inversión del MOP estuvo relacionada con asegurar el suministro de agua potable para la megaciudad en que se estaba convirtiendo Santiago. En 1953 se inició la construcción del embalse El Yeso, situado a unos 2.600 metros de altura al este de la capital, el que permitiría acumular hasta 250 millones de metros cúbicos de agua, asegurando el suministro por todo el siglo XX. En 1964 fue inaugurado el mismo, luego de un largo retraso, permitiendo common el volumen del agua del río Maipo, del cual se abastecía de la planta de tratamiento de agua Vizcachas, inaugurada en 1947. Junto con esta obra se emprendió en 1963 la construcción de una nueva planta de tratamiento de agua, la planta de filtros Las Vizcachitas, gracias a un préstamo del BID de US$5,12 millones. Estas inversiones venían a resolver una sostenida demanda de agua potable de la ciudad, que entre 1940 y 1965 estaba triplicando su consumo102. En vista de que no todos los habitantes de las ciudades y pueblos donde llegaba el servicio de agua potable procedían con la prontitud deseada por las autoridades a su conexión domiciliaria, socavando así la política sanitaria y su gran inversión, se procedió a dictar una ley que hacía obligatoria la conexión y servicio de agua potable.